La alegria de vivir.

Hace tiempo en el reino de Mesopotamia vivía un rey. A él le gustaba pasear sin ser reconocido por sus súbditos.
Un hombre llamado Hassam siempre estaba de fiestas. Un día pasaba el rey por la casa de Hassam, y oyó mucho ruido y entró a ver lo que pasaba y vio a Hassam celebrando una fiesta y le dijo a Hassam de donde sacas tanto dinero para fiestas le dijo el rey a Hassam.

Hassam le respondió de mi trabajo de zapatero, y  le dijo el rey:
- ¿Y si mañana te quitaran tu puesto de trabajo?
-Pues me buscaré otro trabajo le respondió Hassam.
Al día siguiente el rey prohibió el trabajo de Hassam y fue a ver como se las había apañado Hassam ahora, y se dirigió a la casa de Hassam y oyó ruido y vio que Hassam estaba haciendo una fiesta y entró y le dijo:
- ¿ De dónde has sacado el dinero?
 Y respondió  Hassam:
-De mi nuevo trabajo de aguador.

Y le dijo el rey a Hassam y si mañana prohibieran el trabajo de aguador, pues me buscaría otro y el rey le dijo te admiro mucho porque tu siempre te buscas un trabajo y siempre estás alegre y celebrando fiestas.